Muy a menudo nos condicionan nuestras creencias y experiencias pasadas. Estamos convencidos que las cosas “son así” o que aquello “no puede ser”.
Vamos por la vida con unas gafas que filtran lo que nos llega al cerebro y nos impide ver cosas muy interesantes y quizás fundamentales para nosotros.
¿Tomate unos segundos para disfrutar de un TANGO?
¿Cuales son las diferencias respecto a lo que esperabas?