Estas tan acostumbrados a marcar objetivos y a actuar para conseguirlos, que te dejas muy poco tiempo para la introspección. De hecho parece que cuando no estas corriendo o “liado”, pierdes valor.
¿A qué te lleva “no tener tiempo para nada”?
Pues a no pensar, y sobre todo a no pensar en ti.
La introspección te lleva a la intuición, la intuición a la inspiración, la inspiración a mayor conciencia. La conciencia te ayuda a tomar decisiones meditadas y las decisiones meditadas son fundamentales para estar satisfecho contigo mismo. Lo podemos llamar estar en tu centro.
Cuando tomas tiempo para reflexionar sobre tus valores, creencias, vida y trabajo, comienzas a identificar lo que es realmente importante para tí. Tanto si meditas, escribes un diario, trabajas con un coach o simplemente hablas con un amigo, consigues mayor inspiración y motivación y acabas tomando decisiones que te dan mayor serenidad y satisfacción.
Richard Leider entrevistó miles de profesionales jubilados que habían tenido éxito en su profesión. La mayoría le comentaba que si pudiesen vivir su vida de nuevo:
- Tomarían el tiempo de ser mas reflexivos
- Tomarían más riesgos
- Harían lo necesario para entender su sentido del deber y del cumplimiento.
Oliver Wendell Holmes decía «La mayoría de nosotros llegamos a la tumba y todavía tenemos nuestra música dentro de nosotros»
¿Qué música tienes todavía oculta dentro de ti?
Image: Evgeni Dinev / FreeDigitalPhotos.net
¡Muy interesante esta reflexión! Cuesta a veces detenerse a “pensar” enmedio de la vorágine en la que vivimos. ¿Tienes alguna recomendación para conseguir practicar esta introspección?
¡Gracias!